viernes, 21 de agosto de 2015

Asalvajada


Odio la sensación de tener n blog Guadiana. No me gusta aparecer y desaparecer. Pero a veces me quedo en silencio. Bueno, eso no es correcto. No hablo mucho y necesito quedarme sin hablar pero hasta cuando no hablo expreso cosas. Necesito el silencio porque es en ese momento cuando mantengo conversaciones conmigo misma.

Y eso fue lo que ocurrió. En el último post, Cereza me decía que algo me rondaba y me quedé pensando en los post que estaba escribiendo esos días y en lo que me rondaba. Llegué a la conclusión de que por alguna razón, estaba "ajustando cuentas" con personas que pasaron por mi vida y dejaron su huella en mí. La semana siguiente al último post la pasé soñando con gente que ya no tengo cerca por elección propia o por causas de la vida. Familiares muertos, amigas que dejaron de ser y relaciones amorosas fallidas o simplemente fracasadas. Soñé con muchas ellas, con algunas dolía aún. Supongo que es una asignatura que tendré que aprobar en algún momento... el que la gente se va de tu lado cuando ha cumplido su función y no siempre es responsabilidad mía conseguir que se queden.

Pero volviendo al presente... he estado un par de semanas de vacaciones. Asalvajada. Ese ha sido mi estado. Aprovechando los calores madrileños me he ido despojando de ropa hasta ir prácticamente desnuda. Y lo cierto es que me gustaría ir sin ropa por muchos más sitios. No tengo afán exhibicionista pero cada vez me gusta más la sensación de notar el aire sobre mi piel, o el agua... Tenemos un montón de espacio destinado a sentir, muchos centímetros que reciben constantemente información del exterior y creo que nos saboteamos negándonos a hacernos conscientes de toda la información que llega.

Me gusta rascarme, hacerme cosquillitas, recorrer las palmas de mis manos y el contorno de mis dedos. Me gusta sentirme, que mi piel sienta el aire o el agua del que hablaba y el tacto. Somos piel. Y nos tocamos muy poco. A nosotras. A las demás. Desde que cruzamos la adolescencia aprendemos a sentir pudor e incluso rechazo si nos tocan. A muchas nos gustan los abrazos, pero cuántas nos quedamos tranquilamente abrazadas (no a las parejas) más de 5 segundos? ¿Por qué no tocamos a las personas tanto como tocamos a nuestros peluditos?

Durante las vacaciones visité Zamora y estuve por algunos pueblos donde había campos rocosos. Recordé cuando de pequeña, en los campamentos por la sierra madrileña, me descalzaba para subir por las rocas. Me gustaba mucho el tacto rugoso y duro de las rocas en las plantas de los pies. Si había alguna que fuera grande me tumbaba sobre ella intentando que la mayor parte de mi cuerpo estuviera en contacto con la superficie. Era un momento de paz y felicidad absoluta. Un instante pleno antes de seguir saltando con la sensación de ser un Mowgli cualquiera.

7 comentarios:

  1. Alasdemariposa:Buenos días Mowgli-Guadiana :-)
    A veces es necesario ese silencio, nos sirve para descubrir ( nos ) .

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    1. y reconectarnos.... al menos en mi caso...

      Adoro a Mowgli desde que supe de él por primera vez. 4º de EGB (no sé si tú la pillaste o eres de las que han hecho Primaria). Teníamos el Senda como libro para lecturas y el párrafo decía... "... Contentaos con saltar diez u once años para imaginar lo fantástica que era la vida de Mowgli en la selva". Y yo, como 9 años soñaba con ser ese niño (en realidad un ser andrógino) que caminaba descalzo, aullaba con los lobos y se iba de cacería con Bagheera y Baloo.

      :-)

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  2. Y no solo el silencio....asalvajarse también viene bien, en la ciudad estamos demasiado encorsetadas. Si llegas a subir un poco mas arriba de zamora lo mismo habríamos coincidido!! jejeje

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    1. Ay Tuki... tendría que haber hecho un tour.... en León una amiga "virtual" a la que ya tengo ganas de ponerle cara, en Orende una amiga de toda la vida que me ofrecía pensión completa, tú al norte... Asturias, Gran Bretaña, Círculo Polar Ártico????

      En otoño me da por abrazar árboles. Es un asalvajamiento más zen pero si... la ciudad es antinatural por definición.

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  3. Me ha recordado el título a una amiga enfermera que suele venir en la vendimia para ayudar a sus padres. Suele decir que después de vivir jnos días "asalvajada de cuerpo" volver al corsé urbanita le

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    1. le.... debe de costar un ovario y parte del otro.... imagino...

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  4. Me pide ETC que publique en su nombre... transcribo:
    "Qué gustazo SENTIR la piel de una misma y la de las personas que queremos (sea de la forma que sea). Y qué rollazo la adolescencia y sus pudores. Jejeje

    Besos, salvaje.
    Etcétera

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