sábado, 7 de agosto de 2010

No tengo prisa

No tengo prisa, pensaba mientras te miraba. Contemplaba cómo con ese gesto tuyo tan decidido cambiabas de montón la ropa que yacía esparcida por tu cama. No, no tengo prisa.

De vez en cuando levantabas la vista y me mirabas e incluso llegué a percibir un asomo de sonrisa en tu boca. Esa boca que nunca me he cansado de mirar, intentando apresar el misterio que tiene. Después de tanto tiempo aún no lo sé

Mientras terminabas de separar la ropa y meterla en los cajones seguimos hablando. Y fue algo tan natural como si no hubiéramos dejado de hacerlo nunca. Mis palabras brotaban con calidez y percibía la ternura de las tuyas. Después nos abrazamos. Nuestros cuerpos seguían encajando como lo hicieron desde el principio. La comunión de nuestras almas y todo lo que nos habíamos callado en estos últimos meses fluyó en aquel abrazo. Me diste un suave beso en el cuello. Habías dicho que no querías herirme y el beso era una afirmación de tu promesa. Como una pluma tu beso voló a mi corazón y allí se posó con la suavidad con que nos separamos.

En 10 días me iré de vacaciones. Tú también. Llegará septiembre y miraré al verde profundo de tus ojos para descubrir que me sigo viendo reflejada en ellos. Tú habitas en mis sonrisas.

No, no tengo prisa


  

  

5 comentarios:

  1. Chris, hermosísimo lo que cuentas. No tener prisa cuando no sirve para nada. Saber esperar y también, incluso, saber no esperar. Un gran abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Bellísimo, Chris, bellísimo. Te he entendido perfectamente.

    Besos!

    ResponderEliminar
  3. Que lindo es cuando podamos dejar ir al ser amado en paz... tu la tienes, tienes mucha paz, y eso demuestra cuanto has amado.
    Un beso bonita!

    ResponderEliminar
  4. ¿Qué te puede comentar alguien cuayo blog se llama "sin prisas (turismo interior)"?

    Solamente la manoseada frase de que las cosas llegan cuando tienen que llegar ;)

    besitos niña

    (preciosa canción, muchísima sensibilidad)

    ResponderEliminar
  5. Candela, creo que el equilibrio pasa por no forzar nada. Ahor amismo mi corazón está esperando. Y si un día se cansa de esperar será porque ha llegado el momento de iniciar nuevos caminos.

    Morgana, gracias por leerme y por tu comprensión. Si te apetece contarme en mi perfil tengo mi dirección de correo.

    Mayela... no todos los días amanezco con la misma paz. Pero si, se agradece poder estar tranquila.

    Pena: Sin prisa, sin prisa... y que llegue lo que tenga que llegar cuando sea. Me ha costado mucho tiempo darme cuenta de que forzar las cosas sólo las empeora.

    Besos!!!

    ResponderEliminar

Related Posts with Thumbnails