lunes, 18 de marzo de 2013

Sobre las búsquedas

Hablaba ayer con una amiga sobre la insatisfacción vital que nos asola y las búsquedas constantes que hacemos...muchas veces sin saber realmente el objeto de nuestra búsqueda...

Conozco esa sensación de sentirme vacía, de no encontrar(me) de no sentir(me). Fueron años malos en los que tuve que reinventarme, asumir muchas cosas y descubrir que la vida es un camino lleno de experiencias malas pero apasionante en todo lo que ofrece.

Creo que en muchos de mis post trato de expresar precisamente eso...la pasión por vivir, por sentir, por disfrutar de los momentos que van llegando. Ayer se lo decía a esta amiga, que a falta de encontrar algo grande que te llene...ese concepto que nos han vendido de la felicidad, he aprendido a encontrar pequeños momentos únicos que me llenan de vida y que me alientan a seguir cada día.

He pasado los últimos cinco años moviéndome mucho, conociendo muchas personas...la gran mayoría mujeres. Tratando de encontrar gente que mereciera la pena...¿para qué? pues para todo, para compartir experiencias, para que me acompañaran en el camino....y he tenido que deshechar a muchas de esas personas, convencida de que no me llenarían. Sólo me arrepiento de haber dado muchas oportunidades a algunas que sabía que no me aportarían nada positivo. Eso me ha enseñado a ser más selectiva y a no empeñarme en lo que no puede ser...

Estos días estoy viviendo momentos muy bonitos, llenos de esa sonrisa mía tan difícil de ver.

Me he dado cuenta de que hay algunas personas de las que he conocido en el último año que aún no estando muy cerca, cuando vuelven siguen mereciendo la pena, como el primer día. Hay personas con las que no llegaré nunca a entederme, quizá porque nuestra forma de actuar es radicalmente diferente. Y hay una persona nueva por la que apuesto claramente para compartir muchos momentos y sentimientos.


He leído una cita de Chavela que os dejo aquí:

"Conversé y hablé acerca de mis experiencias, de todo lo difícil que hay en la vida., de todio lo lindo, de la extraña ternura que al final de mi vida emergió para rodear y rodearme. Esa ternura que estaba guardada en el armario de mis recuerdos, a la espera de que alguien lo abriera. Pasé años y años sin entender por qué. Por qué diablos continuaba encerrada, ahí donde estaban mis pensamientos y mis verdades. Ahora lo sé y estoy tranquila. La ternura está en la verdad, en mi verdad, en mis verdades. Ve y diles a todos que ahí se las dejo."

6 comentarios:

  1. Me alegro que todo vaya encarrilàndose. No hay nada mejor que medir la felicidad por pequeños momentos para que al final la suma dé un número +.
    Sigue disfrutando y que las que estamos cerca podamos verlo.
    Un abrazo
    Etcétera

    ResponderEliminar
  2. Cuando comprendemos Y ACEPTAMOS que no va a ocurrir algo grande en nuestra vida que nos colme de felicidad para siempre!!!, que el camino estará lleno de pequeños grandes momentos e intercalados otros no tan buenos (algunos incluso bastante malos) es cuando somos capaces de sentir que “vivimos” y apreciar nuestra felicidad.
    Chirs, en un momento u otro todo tiene su contrapartida, lo importante es el saldo final ;-)
    Una abraçada forta,

    ResponderEliminar
  3. Huy, sí, la ternura...
    Besos.Lenteja

    ResponderEliminar
  4. Las cosas se van colocando en su sitio (me doy por aludida cuando hablas de personas nuevas...)

    BESOS

    ResponderEliminar
  5. Todo a su tiempo y en su justa medida. Tú eres las estación. Las personas son las que llegan hasta ti o parten de ahí. Tú decides a quién dar paso, a quién desviar y a quién aparcar en tu estación.

    Un beso.

    ResponderEliminar

Related Posts with Thumbnails