Hay días que es mejor no levantarse. Días en que pones el pie en tierra y ya sabes que el cuerpo no augura nada bueno. Que te notas rara, revirá, con una sensación de.... no, hoy no debería moverme de casa...
Me he levantado a las 6 de la mañana y aún así he llegado 20 minutos tarde a trabajar. Podría pensar que ha sido por la mujer que casi me mata en el metro después de que el estornudo que me ha pillado por sorpresa le haya alcanzado la mano. Pero no. Quizá porque con un frenazo justo antes de llegar a mi estación, cuando ya estaba levantada, me he abalanzado sobre el culo de un tío altísimo que estaba delante de mí. Después me he quedado pensando si sería un hecho fortuito. O tal vez un inicio de cambio de orientación sexual...
Pero en cualquier caso ninguno de estos sucesos han sido el causante de que llegara tarde, sino el hecho de haberme pasado 20 minutos buscando en mi casa como una loca las llaves de mi ex. Está fuera de Madrid y me pidió que le regara las plantas y una semana después cuando voy a coger sus llaves, estas han desaparecido. He buscado por todas partes. Estaban ahí, en la mesa del salón pero por más que he movido los libros que tengo encima no las he encontrado. Estanterías, cajones, habitación, cocina... incluso baño. Cuando he llegado a la desesperación hasta les he preguntado a las gatas. Después me he dado cuenta de lo absurdo de la situación y me he declarado vencida.
En la parada del bus me he dado cuenta de que las llevaba en mi mochila porque las había metido antes ahí. Y si... ese es el motivo de llegar tarde hoy. Pasarme 20 minutos buscando unas llaves que estaban en mi mochila.
Y ahora ando comiéndome con verdadera ansiedad un paquete de frutos secos. Es lo que tiene el síndrome premestrual. Ese, si... el que me hace pensar... "las hormonas que cabronas"... ;-) que ya sabemos cómo funcionan y a mí me llevan a tal estado de ansiedad que paso de tocarle el culo a un tío, a pelearme con varios clientes esta mañana, o mandar a mi jefe a la mierda porque se le ocurre venir en mi tiempo de descanso a darme un papel....El puñetero síndrome premenstrual que me tiene tan triste estos días, pensando en los imposibles, en las apetencias, los deseos, lo querido, lo buscado, el movimiento y la desidia.... Este puñetero SPM que me deja al borde de las lágrimas aunque a menudo salgan en forma de gruñidos, que me lleva a abandonar por falta de fuerzas, que me instala en la única querencia de un abrazo. Ese que no llega...
Menos mal que el síndrome termina cuando llega la regla. Hay que joderse...
Gracias a mis chicas de la T.R. que hoy se están volcando en animarme
Tu tb me has recordado a mí el cuento de aquel hombre, que andaba como loco por todo el pueblo buscando su mula, encima de su mula. :))
ResponderEliminarTanto estres acaba con nuestra neuronas, tan sensibles y tan valiosas.
También al leerte me da por querer mucho más que las quiero, a mis hormonas. Hasta el momento son tan maravillosas que no conozco el SPM. ¡Espero que no lean este comentario y decidan boicotear mi tranquilos ciclos!
Al menos encontraste las llaves, oye...
Un abrazo Chris.
Sé que voy a quedar fatal pero al leer spm he pensado que el post se titulaba surrealismo y su p... Madre. He pensado, qué enfadada está Chris! Jajajaja
ResponderEliminarÁnimo mujer, ya te queda menos para la menopausia, :-P
Pues yo creia que iba tb de algo de su pu-a madre.jajaja.si las llaves llegan a ser un lobo te comen.jeje.buenos dias.
ResponderEliminar¿premenstruar o despiste? ejem ejem
ResponderEliminarun beso, calamidad