Leyendo la otra noche el post de Farala
a propósito de ir de acampada, me vinieron a la cabeza un montón de
sensaciones y recuerdos. Lo primero fue pensar...pues si, yo fui
scout, una bolloscout visto desde la distancia.
En esa etapa viví los mejores momentos
de mi infancia y adolescencia. Mil anécdotas... noches de inmenso
frío en la tienda por la sierra de Madrid o de Ávila, cuando nos
perdimos haciendo la Ruta del Cares en medio de una inmensa nevada
sin más comida que una tableta de chocolate y una cantimplora de
agua por persona, (si, fue en aquel campamento volante donde dos lugareños observaron cómo evacuaba junto al río), la araña que me
picó y que me provocó que pasara un verano sin poder bañarme, el
orgullo de haber construido cabañas, puentes, mástiles enormes...y
las últimas noches de los campamentos de verano, en los que
dormíamos al raso y me quedaba despierta hasta la madrugada
contemplando el cielo estrellado.
Yo fui una niña feliz en los días de
acampada. Desarrollé un profundo amor por la naturaleza y una
profunda aversión hacia determinados bichos. Pensaréis que es
incongruente pero qué se le va a hacer, estoy hecha de contrastes!!
Han pasado los años y aunque he
mantenido ese amor por la naturaleza se ve que he evolucionado en la
capacidad por adaptarme a dormir en cualquier sitio. No me importa
que la superficie esté dura, de hecho prefiero las camas más bien
duritas peeeeeero una necesita su espacio.
El fin de semana pasado que nos fuimos
a la sierra en plan precario nos avisaron de que no había sábanas y
allí que me fui yo a comprar un saco de dormir. Tan contenta con mi
saco nuevo, de esos que apenas pesan 600 gramos y que abultan muuu
poco. Llegó el momento de dormir y lo extendí sobre el colchón.
Ya a primera vista me
parecioooooó...cómo deciros...estrechillo...así...como tipo
sarcófago...Tenía una cremallera lateral. Probé a meterme. De
primeras me gustó porque era cálido. La cremallera llegaba hasta
las espinillas; a partir de ahí se estrechaba mucho más y comencé
a notar agobio por no poder abrir la zona de los pies...Inciso...¿Os
he comentado alguna vez que me muevo muchísimo por las noches? Me
paso el rato dando vueltas sobre mi propio eje.
Así que me metí en el saco, cerré la
cremallera y noté que ahí dentro me sentía completamente
aprisionada. A todo esto...no podía abrir la cremallera y tuve que
salir reptando para escaparme de la sensación de agobio...
Las heteras se terminaron los mojitos,
cesaron las risas, se fueron durmiendo y yo seguía peleando con el
saco...mejor dentro...pero con la cremallera abierta, no, que si la
dejo abierta en cuanto me muevo me destapo...pruebo a cerrarla un
poco...joder qué agobio...mejor fuera....me pongo el saco por
encima...no, vamos a abrirla entera y me tumbo encima...vaya, olvidé
que la zona de los pies no se abre...pues los meto...ays que no
puedooooooo.
En un momento determinado de la noche
me pareció ver que si pasaba mis dedos por el interior del saco
aparecían destellos de luz. Pensé que me había quedado dormida por
fin y que lo había soñado. Probé a hacerlo para convencerme a mí
misma de que era una ilusión y me quedé alucinada al ver que
aparecían esos destellos. Eran como mini chispas que saltaban dentro
del saco al friccionar...Me acojoné por completo pensando en que si
me dormía y movía se generaría una combustión espontánea y
moriría quemada. Conseguí dormirme cuando el cielo empezaba a
clarear...
Con cuatro horas de sueño, la marcha
por el campo del día siguiente fue un infierno y me he pasado toda
la semana sin ser persona. Total, que tengo claro que lo de ir de
acampada si, pero nada de sacos. Me temo que me he vuelto demasiado
comodona.
ResponderEliminarLos hay más amplios, o al menos yo compartí hace años uno con otra persona, eso sí, parecíamos sardinas enlatadas.
Yo no los soporto y los uso sólo si es imprescindible. Me gusta poder moverme como a ti y dentro de un saco te sientes maniatada... "patiatada" y " pieatada"...
Besitos
De momento ya me lo he quitado de encima, pero en la tienda me han dicho que el que yo quiero, de sábana, es tan finito como una camiseta. Poco me va a abrigar...
EliminarBesos!
Fe de errata: los uso sólo si "son"....
ResponderEliminarsoy incapaz de dormir en saco, de siempre. yo con edredón en mi vida de jipi-vagabunda actual.
ResponderEliminarJipi-vagabunda glamourosa!! jejeje
Eliminarjajajajajajaja, te he imaginado reptando embutida en el saco jajajajajajajaja
ResponderEliminarRepté, vaya que si repté...entre el agobio del espacio y el miedo a la combustión espontánea....
EliminarLa verdad es que si se ve medio claustrofóbico por la estrechez en la zona de los pies... ahora que lo de la combustión espontánea es de risa loca nena, se nota que no te pasaste tu adolescencia leyendo acerca de cosas y casos paranormales jajajajajaja
ResponderEliminarAhora que se ha ido el calor asqueroso aprovecha para darte unas siestas de campeonato para que vuelvas a ser persona, anda :)
besito
A las diosas pongo por testigas que nunca me he leído ese tipo de cosas, pero de verdad Pena...en cuanto frotabas lo mínimo saltaban fogonazos de luz. Ummmmm...se me está ocurriendo una energía renovable y barata que acabaría con las eléctricas...
EliminarEntre la nochecita aquella y la de anoche...no sé con cual quedarme jajajajaja.
Un besoteeee!
jaja como se te ocurre un saco tipo momia!!! habiéndolos anchitos con cremallera en “L”, cómodos y calentitos.
ResponderEliminarDescubrí la acampada a los veintitantos y el estreno fue caótico, montar por primera vez una canadiense (nada que ver con las que hay ahora)en plena noche a la luz de un farolito y después una tormenta de órdago en pleno Pirineo, con cada relámpago parecía que encendían un fluorescente dentro, y el viento ... La debimos clavar bien xq no amanecimos flotando en el rio jeje. Lejos de desanimarme quede enamorada de este estilo de vida que he practicado regularmente hasta hace 5 años.
Regala ese saco que para ti es un instrumento de tortura!!!
Un petó y buena semanita.
Uf!! aquellas tiendas que pesaban unos 10 kilos y que teníamos que llevar en el cogote durante las marchas...te entiendo... Para las tormentas (por si no lo sabes) lo mejor es poner una patata cruda partida por la mitad, insertada en el palo vertical de la tienda.
EliminarHe cambiado el saco por unos calcetines muy chulos de colores!!
Feliz inicio de semana ybesos, guapa!
Tengo dos sacos de dormir, uno de verano y otro de invierno. Aunque más que ir de acampada donde los he llevado era a la clase de yoga. En el momento de la relajación me quedo fría, fría y allí que iba con mi saco de dormir.
ResponderEliminarSi no lo puedes utilizar ya puedes hacer una rifa con él entre tus lectoras, por ejemplo.
Besos
Cereza, no me des ideas, que rifo el saco conmigo dentro!!! jajajaja
EliminarBesos!
Buuuuffff...me toca uno de esos y no pego ojo en toda la noche. Yo también necesito mi espacio aunque no me mueva mucho, pero meterte ahí debe ser como estar embuchada cual longaniza !!!
ResponderEliminarQué agobio !! Yo no he ido mucho de acampadas, pero ahora hay muchas alternativas al saco. Yo me pido supercolchoneta hinchable aunque tenga que montar la tienda encima !! jajajajajaja...
La del hospital.
Me conformo con un saco en el que me pueda dar la vuelta sin temor a ahorcarme en alguna parte de mi cuerpo! Tú eres capaz de llevarte alguna cama del hospital y todo!! jeje
EliminarBesos!
Si es articulada y con mando...me la llevo !!!
EliminarJajajaja
la del hospital
jajajajajajaja... perdón, Chris... a eso le llamo yo pasar "una nochecita toledana".. jajajajajajaja... Espero que ya te hayas recuperado.
ResponderEliminarBesos.
Ná mujer, riéte que es muy sano. Yo también me ríos días después pero lo cierto es que fue una nochecita toledana, como la llamas tú
EliminarBesos!!
Yo creo que no hay nadie que se mueva más que yo durmiendo.
ResponderEliminarLo del saco no lo he probado ni me llama mucho la atención ,soy muy comodona yo.
Alas...te propongo...vente una noche al Rincón del Arco Iris...nos dormimos en mi cama y a ver quién echa a quién...como si fuera un combate pero dormidas jajajajaja!!
EliminarAhora lo leo. JAJAJAJA
ResponderEliminarAhora entiendes todo lo de esta tarde, no? :-)
EliminarHola Chris: Quería decirte que aunque no suelo comentar, me encanta leerte. Que en días como hoy, que estoy desanimada, me haces reír. He leído este post y he releído algunos muy graciosos tuyos. Me encanta cómo hablas de tus gatas, de tu vida... No sé, pero creo que este sitio nos hace sentir (a más de una), acogidas, refugiadas, bien. Te lo cuento porque quiero que sigas escribiendo, contando anécdotas, plasmando emociones, hablando de tus gatitas... Un abrazo y gracias por hacerme reír.
ResponderEliminarJo...gracias!!! no te imaginas la ilusión que me ha hecho tu comentario...saber que las chorradas que digo sirven para animar a alguien y que las cosas más reflexivas o serias trasmiten y llegan...
EliminarCreo que voy a seguir dando guerra una temporada. Esta noche me ha salido un post de los serios porque ando algo rallada pero tengo uno en la punta de los dedos, de los que utilizo para reirme de mí misma. Espero que te arranque una sonrisa y gracias a ti por contarme lo que te sugiero.
Un abrazo y mucho ánimo!!
jajajajaja ¿pero qué clase de saco te has comprado tú?...¿No sabes que los hay tipo sábana, estupendos de la muerte, especiales para claustrofóbicas?
ResponderEliminarGrupo 85, Balú. No te digo más!!!
Ya he devuelto el saco!! Así que Baloo...desde luego te pega mucho más qeu Bagheera o que Akela jajajajaja
Eliminar85 el número del grupo? o el año? porque sobre la misma época yo 434...