jueves, 28 de marzo de 2013
Todo es nuevo
A veces hacemos cosas nuevas, cosas que llevamos a cabo por primera vez y no le damos ninguna importancia. Durante las últimas semanas he hecho bastantes cosas nuevas y he querido ser muy consciente de que las estaba haciendo.
He buscado apresar cada momento, intentando quedarme con las sensaciones y disfrutarlas. Pasar por ese barrio al que tantas veces fui hace años pero a una zona que no conocía, ver la parte de atrás de una iglesia que estaba allí pero en la que nunca reparé, descubrir un árbol solitario de flores rosas y quedarme un rato mirándolo, aspirar el olor a chimenea que aún se desprende de algunas casas, llegar hasta una puerta, golpearla con los nudillos por primera vez y que al abrirse, te contemplen con una profunda sonrisa y unos ojos amables...
No quiero perder estas primeras veces, algo dentro de mí se resiste a incorporarlo a la rutina porque sé que perderá el profundo encanto que tienen esos sencillos actos...
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Golpear con los nudillos es mucho más novedoso que tocar el timbre... ;-) (Ahora).
ResponderEliminarSensaciones renovadas...
ResponderEliminarNi se te ocurra desaprovecharlas. Lo nuevo a veces asusta, pero hay que tener valor para conocerlo y reflexionar sobre ello.
Un abrazo.
Apresar cada momento... Me gusta.
ResponderEliminarLas sensaciones no se pueden recordar con una foto, por eso es tan importante disfrutarlas intensamente.
ResponderEliminarPd.- Al final no hizo falta la barca, pero casi ;-)
Un petonet,